Filosofía

Los momentos perdidos los podemos recuperar, ya que merece la pena vivirlos y después retratarlos como si fuese ayer para poder disfrutarlos al máximo.

domingo, 11 de septiembre de 2011

Mi Camino

A día de hoy, no sé quien soy... Me siento mal..., ya no sé ni que hacer con este cacao mental que tengo en esta cabeza loca. Porque ya no me siento YO, me siento extraña, me siento...como decirlo...sin nada, vacía, hasta el punto de caer en otra depresión por esos que eran antes "mis amigos". Pero, ¿que hacer si a esos que llamaba antes mis amigos, para mi eran lo más maravilloso que había y no había nadie más que ellos? Las cosas cambian y no veas como cambian... Pero ahora mismo pienso en mi y en mi felicidad, me podéis llamar egocéntrica, me podéis llamar hipócrita por poner a todos la cara como "NO ME PASA NADA" y en realidad sí, pero ese "sí", solo algunos lo saben, osea,  los que son importantes ahora mismo en mi vida. Para que mentir.

Me duele no poder ser fría, me duele no poder ser calculadora, me duele no poder ser como quiero llegar a ser y ser otra vez la que pida un LO SIENTO sin a ver yo hecho nada. Pero eso no quiero llegar a ser, ni mucho menos. Porque eso sería caer tan bajo, como han caído algunos. Pero ya quiero pasar página a esto que me ha hecho tanto daño y ahora mismo me estoy dando cuenta que amigos de verdad son los que se cuentan con los dedos de una sola mano. Y que todo el amor que sentía a esas personas se me ha desvanecido o se me está yendo poco a poco. Por el simple hecho de que tenía una idea de ellos y en realidad son otra persona. Ellos sabrán lo que hacen con su vida. La mía ya está en marcha y partiendo de una nueva idea que me siento muy orgullosa de ella.

1 comentario:

  1. Te equivocas, sigues siendo tú. Es más, mucho más madura y con mucha más personalidad. Más quisieran algunos llegar a la suela de tu chancla. Es bueno que cambies de camino porque has demostrado que el ser sincero con algunas personas, les quema. No se puede ser falso en los sentimientos. Cada uno dice lo que tiene y lo que puede. Los amigos de verdad no te discriminan, ni te insultan, ni te amenazan, ni te ponen condiciones, y menos aún, no van de prepotentes por la vida ni de líderes de la manada. Esos no son amigos, son lobos con piel de cordero. Lo amigos de verdad hablan contigo y te escuchan y les puedes explicar tus temores. Pero ya sabes, tan malo es el pastor que te injuria como los borregos que le siguen. Algún día se darán cuenta de lo que han hecho porque a ellos también les pasará y entonces, la manada se disolverá y el pastor se quedará sin ovejas.
    Besos

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